El parlamento finlandés aprobó ayer una nueva legislación que pide el fortalecimiento de la seguridad a lo largo de la frontera de 1,340 kilómetros (833 millas) de Finlandia con Rusia.
Se aprobó un nuevo proyecto de ley en medio de crecientes preocupaciones de seguridad por la guerra de agresión librada por Rusia contra Ucrania, y temores de represalias de Moscú después de que Finlandia solicitó unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Finlandia y Suecia solicitaron unirse NATO en mayo, citando preocupaciones de seguridad urgentes provocadas por el ataque brutal y no provocado de Rusia contra Ucrania. Ambos países nórdicos han practicado durante mucho tiempo la política de neutralidad internacional, pero esta se desvaneció rápidamente después de que Rusia invadiera Ucrania con falsos pretextos en febrero.
La nueva legislación permite a Finlandia construir barreras a lo largo de su frontera con Rusia y suspender o restringir el tráfico de inmigrantes en "circunstancias excepcionales".
Los partidarios de la nueva ley citaron la crisis de inmigrantes ilegales a fines del año pasado que llevó a Polonia a erigir un muro a lo largo de su frontera con Bielorrusia que incitaba a los inmigrantes ilegales de África y Medio Oriente y los ayudaba en sus intentos de cruzar ilegalmente a la UE.
“Con esta ley, estamos tratando de enviar un mensaje de que usar a las personas como herramienta, como vimos intentarlo en la frontera entre Bielorrusia, Polonia y Lituania, no tendrá éxito en Finlandia”, declaró el miembro del Parlamento de Finlandia, Ben Zyskowicz. .
Si Rusia intenta acosar a Finlandia instigando una invasión de inmigrantes ilegales similar a lo largo de su frontera con Finlandia, la nueva ley permitirá que el gobierno finlandés lleve a todos los inmigrantes ilegales a un punto de procesamiento centralizado, como un aeropuerto, sin demoras legales.
La nueva legislación finlandesa fue aprobada por una gran mayoría, lo que significa que el parlamento podrá acelerar las nuevas políticas fronterizas.
Los críticos de la nueva ley expresaron su preocupación de que podría violar los acuerdos internacionales, incluidas las directivas de la Unión Europea sobre los solicitantes de asilo, pero su llamado a devolver el proyecto de ley a un comité parlamentario para que lo vuelva a examinar fue rechazado por un margen de 103 a 16.
El dictador ruso Vladimir Putin, visiblemente furioso por la expansión de la OTAN en Escandinavia, a pesar de que fue causada únicamente por la agresión rusa, amenazó el mes pasado que si las fuerzas y la infraestructura de la OTAN se colocan en Finlandia o Suecia, Rusia “se verá obligada a responder ojo por -tat, y crea las mismas amenazas para los territorios desde los que se ve amenazado”.
“Habrá tensión, por supuesto, si nos amenazan”, agregó Putin.