Según Abdul Muhari, portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Indonesia (BNPB), la administración de la regencia de Flores Oriental en la provincia de Nusa Tenggara Oriental ha anunciado el estado de emergencia tras la elevación del nivel de alerta del Monte Lewotobi Laki-Laki a la categoría más alta el viernes.
El Centro de Vulcanología y Mitigación de Desastres Geológicos observó un notable aumento de la actividad volcánica del 13 al 20 de marzo, caracterizado por un incremento en los sismos volcánicos y la aparición de columnas eruptivas. Una erupción significativa se produjo a las 23:56 hora local del jueves, con una columna de ceniza que alcanzó una altura estimada de 8,000 metros sobre la cima, aproximadamente 9,584 metros sobre el nivel del mar.
Esta erupción ha interrumpido el transporte aéreo, provocando numerosas cancelaciones de vuelos internacionales. Según la administración del Aeropuerto I Gusti Ngurah Rai de Bali, siete vuelos internacionales fueron cancelados entre las 09:45 y las 16:00 hora local del viernes. Además, cinco vuelos internacionales sufrieron retrasos, aunque los vuelos nacionales aún no se han visto afectados por cancelaciones.
“Como medida de anticipación, el gobierno de la regencia de Flores Oriental declaró un estado de respuesta de emergencia por la erupción del Monte Lewotobi Laki-Laki, que es válido por 14 días desde el 20 de marzo al 2 de abril”, según el comunicado de prensa oficial de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Indonesia.
Un total de 389 personas fueron evacuadas el miércoles de aldeas en riesgo de sufrir erupciones, indicó. Según datos de la BNPB, alrededor de 4,000 residentes permanecieron desplazados desde la primera erupción, el 4 de noviembre de 2024.
Según la agencia provincial de gestión y mitigación de desastres, el número total de evacuados en la regencia ha llegado a 4,796.
La BNPB ha instado a la población a mantener la calma y evitar la desinformación sobre la erupción. Se ha recomendado la evacuación inmediata de los residentes en un radio de 7 km del volcán, así como de los residentes en un radio de 8 km en los sectores suroeste y noreste. La BNPB también advirtió sobre la posibilidad de inundaciones de lava debido al material volcánico arrastrado por el agua durante las lluvias.