Australia ha promulgado hoy una nueva legislación que establece una pena mínima de prisión de un año para las personas que exhiban saludos nazis u otros “símbolos de odio”.
Esta acción legislativa llega en respuesta a una serie de notables incidentes antisemitas, que incluyeron la profanación de lugares de culto y centros comunitarios judíos con símbolos nazis.
Las últimas modificaciones de la ley, aprobadas originalmente en enero de 2024, establecen una pena de prisión obligatoria para los infractores. Los condenados por mostrar saludos nazis o símbolos de odio con la intención de incitar al odio o intimidar a otros ahora estarán sujetos a una pena mínima obligatoria de un año de prisión.
La nueva ley también establece una pena mínima de tres años por financiar el terrorismo y una pena de seis años por cometer o planificar actos de terrorismo.
Según se informa, la legislación propuesta ha recibido el respaldo de numerosas organizaciones comunitarias comprometidas a abordar el odio y la discriminación.
Aunque los funcionarios australianos afirman que esta nueva legislación apunta a la creciente prevalencia del discurso de odio y las acciones extremistas dentro del país, también ha suscitado preocupaciones sobre sus implicaciones para la libertad de expresión.

Numerosos defensores de las libertades civiles han sostenido que, si bien el objetivo de reducir el discurso de odio es loable, es esencial que las leyes se implementen con cautela para evitar violaciones de los derechos individuales.
Sin embargo, según los analistas jurídicos, la legislación incorpora medidas destinadas a conciliar la aplicación de la ley con la salvaguarda de la libertad de expresión. En concreto, la ley prohíbe la exhibición de símbolos de odio cuando tengan como finalidad intimidar o provocar el odio contra un grupo específico.
Se permiten excepciones para fines válidos como la educación, la expresión artística o el estudio histórico.
La policía australiana y otros agentes del orden también recibirán capacitación para garantizar la correcta aplicación de la nueva legislación, dijo el gobierno.