Varios familiares que sufrieron la pérdida de sus seres queridos en el accidente del Boeing 737 MAX8 están buscando una reunión con los senadores estadounidenses, incluido el líder de la mayoría del Senado, antes de la votación de confirmación del jueves de Steven Bradbury como subsecretario del Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT).
Sus temores se derivan del testimonio de Bradbury durante una audiencia la semana pasada, donde los miembros de la familia expresaron su preocupación por el hecho de que él había trabajado activamente para obstruir la implementación de un Sistema de Gestión de Seguridad exigido por el Congreso para Boeing mientras trabajaba en el DOT durante la administración inicial de Trump. El establecimiento de un sistema de seguridad de este tipo podría haber evitado los dos trágicos accidentes del Boeing 737 MAX8 en 2018 y 2019, que resultaron en la pérdida de 346 vidas.
El 24 de febrero de 2025, las familias se comunicaron con el senador John Thune (RS.D.), líder de la mayoría del Senado, para solicitar una reunión para abordar las cuestiones planteadas durante la audiencia de confirmación del jueves pasado ante el Comité de Comercio, Ciencia y Transporte del Senado. Expresaron su preocupación por el hecho de que Bradbury, que ocupó un puesto en el DOT durante la primera administración Trump, no logró obtener información vital solicitada por el senador Roger Wicker (R-Misisipi) sobre los dos accidentes de Boeing, a pesar de tener un equipo legal de 500 miembros a su disposición. Las familias también se comunicaron con los senadores Wicker, Daniel Sullivan (R-Ala.), Shelley Capito (R-Va.) y Gerald Moran (R-Ks.).
Nadia Milleron, de Massachusetts, quien perdió trágicamente a su hija Samya Rose Stumo, de 24 años, en el segundo accidente de Boeing en Etiopía, comentó: “La declaración de Bradbury al Senado: ‘Tenemos el sistema aéreo más seguro del mundo, pero no podemos fallar en nuestro trabajo’, refleja una total insensibilidad hacia las 84 personas que han perecido en accidentes aéreos en todo Estados Unidos tan solo en el último mes”.

Bradbury ocupó varios cargos en el Departamento de Transporte durante la primera administración de Trump, entre ellos, subsecretario interino, secretario interino y asesor general confirmado por el Senado, donde era responsable de supervisar un equipo de 500 abogados y personal legal. Fue designado secretario interino de Transporte el 11 de enero, tras la renuncia de Elaine Chao, y Sean Duffy prestó juramento como secretario el 28 de enero.