(eTN) – El Maia Luxury Resort and Spa introdujo recientemente una innovación en el archipiélago, que permite a sus huéspedes mantener los pies secos y los zapatos puestos cuando regresan de sus yates amarrados en la playa del resort o cuando parten para una excursión de un día para navegar alrededor de la isla.
"Sealegs", un esquife motorizado con tres ruedas, tiene su base en el resort y los huéspedes pueden abordar en la orilla antes de ser conducidos al agua, luego se levantan las ruedas y, listo, comienza el viaje por mar propiamente dicho. Este corresponsal tuvo varios paseos emocionantes con el esquife y, aunque recibió mucho rocío en la cara, logró mantener los zapatos secos como prometió el barquero, en este caso Frederick Vidal del Maia.
El “Sealegs” también permite la carga de provisiones y suministros para los yates sin el riesgo de dejar caer cajas u objetos de valor en las aguas del océano. Se entiende que después de ver el nuevo artilugio en acción, varios otros resorts ya se acercaron a Maia para obtener detalles sobre dónde se pueden comprar "Sealegs", por lo que los visitantes pueden esperar ver este nivel de comodidad y facilidad extenderse pronto a otras partes de las islas interiores y exteriores.
El mismo nombre "Sealegs" fue, por cierto, también elegido para el catamarán patrocinado por Maia en la Regata de Seychelles recientemente concluida.
QUÉ QUITAR DE ESTE ARTÍCULO:
- The Maia Luxury Resort and Spa recently introduced an innovation to the archipelago, allowing their guests to keep their feet dry and their shoes on when either returning from their yachts moored off the resort's beach or else leaving for a day trip to sail around the island.
- This correspondent had several exhilarating rides with the skiff, and while getting a lot of spray into the face, nevertheless managed to keep the shoes dry as the boatman, in this case Frederick Vidal of the Maia, promised.
- A motorized skiff with three wheels, is based at the resort and guests can board on the shore before they are driven into the water, the wheels then lifted and, presto, there begins the sea journey proper.